La Organización Meteorológica Mundial (OMM), dependiente de las Naciones Unidas, anunció que el intenso calor, que ya ha establecido récords de temperatura media en junio y registros diarios en la primera mitad de julio, persistirá durante las próximas dos semanas y podría extenderse hasta agosto. Según el brazo científico de las Naciones Unidas para el clima, se prevé que las temperaturas continúen por encima de lo normal en la región mediterránea, con valores que podrían superar hasta en 5° C la media semanal.
Los servicios meteorológicos de Estados Unidos y Marruecos también han emitido alertas por altas temperaturas para las próximas semanas. Ante esta «urgencia», Taalas resaltó la importancia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero lo más rápido y profundamente posible.
Si no se revierte esta situación, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), la principal autoridad científica en esta materia, estima que para el año 2050 alrededor de la mitad de la población europea podría enfrentar un riesgo elevado o muy elevado de sufrir estrés térmico durante el verano.